sábado, 30 de marzo de 2013

Has prendido tarde la llama de una vela casi consumida y deteriorada por el paso del tiempo.

Pero tal era tu ansia de conseguir lucidez y calor, que no cesaste en el intento..lo intentabas....lo intentabas.. Dios fue testigo de tu constancia.
y de pronto, el cansancio llega avasallándote y recalcando su presencia ... consiguiendo establecerse en tu alma y convenciéndote de tu limitación. 

1 comentario:

  1. Frustración o realidad, los límites nos atraen y nos asustan a partes iguales. Es un momento peligroso, un trago difícil y didáctico.

    ResponderEliminar